Myriam Garabito Cociña, presidenta del Comité de Galicia de UNICEF recibión de manos de José Lista Tasende, presidente de la Federación de Áridos, un cheque de contribución del sector de los áridos a la nueva campaña 2018 para la supervivencia de los niños recién nacidos del tercer mundo: “UN NOMBRE, UNA VIDA”. También entregó a Juan Ramón Gallástegui, vicepresidente de la Asociación Forestal de Galicia, un cheque del contribución del sector de los áridos a la reforestación de zonas forestales afectadas por incendios en el entorno de canteras.

Estos dos actos simbolizaron el encargo que las empresas productoras de áridos han recibido de la Sociedad para contribuir al bienestar de los ciudadanos, al suministrar sosteniblemente los productos necesarios para la construcción de viviendas, escuelas, hospitales, carreteras, ferrocarriles, puertos, aeropuertos, etc. y también para numerosas aplicaciones industriales y medioambientales, donde son componentes esenciales.

En el marco de este compromiso con la Sociedad, las empresas crean riqueza en el entorno más próximo, integrando en su gestión los principios del desarrollo sostenible, previniendo y minimizando las afecciones ambientales, preservando las reservas geológicas de materiales aptos para la producción de áridos, formando a los trabajadores y cuidando su salud y su seguridad, investigando para la mejora continua de las técnicas utilizadas en esta actividad y siendo proactivos en la búsqueda de aplicaciones y mercados para sus productos.

Este Congreso ha puesto en valor otro tipo de acciones habituales de las empresas productoras de áridos que han asumido desde hace años un estrecho compromiso con la sociedad. Contribuyen a la conservación del patrimonio, a la celebración de eventos culturales y apoyan los deportes y a muchas causas sociales.

Desde hace mas de 10 años, estas empresas celebran el Día de los Árboles, los Áridos y la Biodiversidad, abriendo las puertas de las explotaciones al entorno social más próximo.

Otros actos del Congreso han demostrado esta faceta menos conocida de la actividad: la entrega de árboles autóctonos gallegos a cada congresista, la celebración de EscombrArte, una exposición de esculturas realizadas con materiales reciclados procedentes de los residuos de construcción y demolición, un concurso de fotografía, acuerdos con Universidades para favorecer la asistencia de estudiantes, la integración de personas con discapacidad que colaborarán con la organización del Congreso, la organización de un Foro sobre la Biodiversidad, etc.